febrero 13, 2023

Memoria de un sábado

By In San Valentín
(a: f)

Hubo una vez

te dediqué sentimientos

incluso

entre líneas

también se filtró en la tinta

el miedo y la duda

Hubo una noche

sentí que entre tus brazos

podía quedarme a dormir

pero la vigilia se hizo mal hábito

y de tu cuerpo me escurrí

Hubo semanas 

que no dejaba que tu imagen se separara de mis ojos

me conformé con un rostro dominical

me encarnaba un temor

de tener tus labios tan cerca y besarlos

tu cercanía se veía como una trampa 

no me atreví a morder

Hubo años

un sábado me acordé de ti:

tu acento

la rebelión de tu pelo

la fuerza de tus brazos 

tu piel crujiente

añoré tus camisas floreadas

la hilera de botones que me gustaba quitar

descubrir tu pecho y absorberte

Recuerdo

-aunque ya no muy bien-

si era tu lado derecho

o el izquierdo

tenías un lunar

extendiéndose como mapa hacia tu pierna

cerca de un territorio sagrado

que disfrutaba profanar

¿Fue el excitamiento de mi propio juego el que no me dejó verte más allá de la cama?

¿Hubo algo entre nosotros y no lo vi?

Hace meses lo confesaste

despreocupado

-como si ya no tuviera más importancia en tu vida-

y dijiste que sí

tu verdad aún resuena en mí

¿Decir que era joven excusa mi estupidez? 

¿Mi miedo?

No supe cuándo te fuiste de la ciudad

ahora estás al sur

cerca de la playa

de la vida a la que querías llegar

Siempre me sedujo tu pasión por la música

podía escucharte horas ininterrumpidas sobre jazz

adoraba ver tu rostro con las historias de Chet Baker

tal vez creías me aburría

o

sólo te avergonzabas infantilmente por nada

Extraño eso,

Yo

sentada en tu regazo

abrazándote con mis piernas

mis brazos

mi alma

creyendo que

el olor de tu cabello

envenenaría mi raciocinio

que tus manos

se convertirían en cuchillas

que me desgarrarían hasta la espina dorsal

Proyecté mis miedos en tu cuerpo 

pensé que eran tus propias fallas

era más suave 

quedarme en mi nube petulante

que atreverme a saltar

Tomaría un camión en este instante

haría la maleta

arrojaría mi ropa a tu vida

me permitiría amarte

aunque sea uno o dos días

encerraría la lógica en un cuarto

por cuarenta y ocho horas

sólo para sentir 

lo que pudo haber sido

a lo que siempre me resistí

Pasaría el fin de semana siendo tuya

en su palabra absoluta

y después

regresaría a la ciudad

con un sabor agridulce

y un sentimiento binario

pero

con la tranquilidad

y la dicha

de haberte amado.

Foto de Emma Filer

Leave a Comment