febrero 11, 2022

Intermitencia

By In San Valentín

Por Otilia Carvajal/Redactora invitada

Una tarde de noviembre, cervezas y un karaoke improvisado con nuestros celulares y videos de Youtube. Dicen que la calma siempre antecede a la tormenta.

Lo que vino después fue una tormenta anunciada de una relación llena de buenas intenciones, pero también de errores y tropiezos que, sabíamos, harían insostenible un nosotros. 

En ese mes también salió el álbum Red (Taylor’s Version), cuyo lanzamiento anunció Taylor Swift con esta frase: “Siempre he dicho que el mundo es un lugar diferente para los corazones rotos”. 

Es difícil no recurrir al cliché —o en este caso, al meme—, que dice “de hecho, hay una canción de Taylor Swift que lo explica”. Esta vez era su nueva versión extendida de All Too Well, que originalmente escribió a los 23 años. 

Él y yo nos veíamos y nos amábamos en fragmentos, por eso, quiero contarlo también en partes, con estrofas. 

“You taught me about your past, thinking your future was me”

Pasaron unos meses y ya sabía de esa operación que te hicieron a los cinco años; ese pasatiempo que nadie conocía; a qué edad te hiciste ese tatuaje.

Creo que nos anticipamos al hacer tantos planes a futuro. La mayoría se quedó en promesas escritas en mensajes de WhatsApp. Pero nos conocimos al inicio de la pandemia, en la época de la incertidumbre, y no nos importó mandar al carajo todo porque no teníamos asegurado un mañana. 

Puedes leer más de esta Desvelada: Sanar una amistad

Me siento mal por dudar de su sinceridad, cuando en ese momento lo creía. “Vamos a conocer a los amigos del otro”, “vamos a conocer a tu familia”, “¿no te gustaría que viviéramos juntos?”.

“And there we are again when nobody had to know

You kept me like a secret, but I kept you like an oath”

Nuestra historia siempre se vivió dentro de cuatro paredes, en la sala de cine, en un Centro Histórico vacío por la pandemia o ante miradas de extraños en un andén del Metro.

Un secreto que ante los ojos de nadie más existió.

“And maybe we got lost in translation

Maybe I asked for too much

But maybe this thing was a masterpiece ’til you tore it all up

And you call me up again just to break me like a promise

So casually cruel in the name of being honest

I’m a crumpled up piece of paper lying here”

Siempre me dijiste que no merecía un amor a medias, y yo lo sabía. “No puedo ofrecerte más”, respondías cada vez.

Nunca hubo engaños, pero la sinceridad también duele. Un día de enero, en nombre de no hacernos más daño, decidió que era mejor terminar con todo. Y como alguien que se cansó de luchar, acepté.

“You said if we had been closer in age maybe it would have been fine

And that made me want to die”

Nos separaban nueve años, él mayor. Le preguntaba a mis amigxs “¿es mucho o es poco?”, “¿está aceptable?”.

A veces nos reíamos de que no entendíamos las referencias del otro, pero después entraban las dudas: ¿querrías lo mismo que yo en un año?, ¿en dos? Allí el camino se comenzaba a agrietar en dos. 

“‘Cause there we are again when I loved you so

Back before you lost the one real thing you’ve ever known”

Antes del quiebre definitivo terminábamos y volvíamos cada ciertos meses. A los mismos lugares, bajo la misma ilusión de que podía funcionar. 

En un último pensamiento egoísta, pienso que si hubieras podido elegir, te habrías quedado.

“Just between us, did the love affair maim you all too well?

Just between us, do you remember it all too well?”

Una es consciente de lo que el otro provocó en nuestras vidas, pero después llega la pregunta “¿para ti significó lo mismo?” “¿Tú también recuerdas ese detalle insignificante?”

A pesar de tenerlo cerca físicamente, intercambiar mensajes sobre el trabajo o algún otro pretexto que nos poníamos, a veces aún quiero romper el pacto que nunca dijimos y preguntar: “¿a ti también te dolió lo que no pudo ser?”

No lo hago. Continúo escribiendo ese boletín que llegó a un chat de reporteros y que tengo abierto desde hace media hora y no puedo terminar.

***

¿Podría decir que él fue mi Voldemort? Diría que sí, porque hay varios motivos por los que no debería ser nombrado.

Ya nos lastimamos demasiado, sin mala intención quizá, pero afín de cuentas. Que no es la primera vez que una chispa termina por darnos esperanza y caer en lo mismo. Tal vez también sea su Voldemort y no deba volver a nombrarme. 

Leave a Comment