febrero 13, 2024

No diré su nombre, cuarta edición: pequeños perfiles de historias de amor

By In San Valentín

Ilustraciones: Omarela Depablos

Una noche en la que una de nuestras editoras se quedó sin internet decidió releer Bluets de Maggie Nelson. La decisión no era arbitraria: es su libro favorito y está citado en uno de los textos que conforman nuestro tercer especial No diré su nombre, ese en el que decide bautizar a su Voldemort como Max Ernst, de una vez por todas. 

Saltando entre citas marcadas en azul en su kindle, encontró el siguiente fragmento:

“177. Tal vez ahora sea más claro por qué no había nada de romántico en que llevaras mi carta contigo a todos lados, durante meses, sin abrirla. Quizá cumplía una función para ti, pero, cualquiera que esta fuera, seguro que no tenía nada que ver con la mía. Mi intención nunca fue darte un talismán, un recipiente vacío para llenarlo con cualquier anhelo, terror o tristeza que constituyera el estado de ánimo del día. Escribí la carta porque tenía algo que decirte”.

Y nos parece importante que esta frase sea el punto de partida para este especial chiquito y un recordatorio para los anteriores (y los que vendrán), porque aunque algunas personas declaran que no deberíamos escribir de relaciones pasadas o incluso esos exnovies andan presumiendo por la vida que escribimos sobre ellos, en realidad al final es siempre para nosotras mismas y por una razón muy sencilla: porque tenemos algo que decir. 

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